Hoy vamos a aprender cómo crear juego sensorial casero para tu bebé (Tutorial)
Qué verás en este artículo
Como sabéis, los bebés descubren y conocen el mundo que los rodea a través de los sentidos, en especial el tacto; es por ello que tocan todo lo que está a su alcance, es su modo de conocer ese objeto nuevo que tienen delante. Por eso es importante estimular el sentido del tacto a la par de los demás sentidos, y para ello son ideales estos objetos sensoriales caseros que aprenderemos a hacer hoy.
Son objetos que podemos realizar con cosas que tenemos en casa, teniendo en cuenta que no deben deshacerse o romperse porque los bebés tirarán de ellos y puede que se los lleven a la boca. Usaremos un pegamento extra fuerte para pegar las texturas a las bases, de este modo no correremos el riesgo que algo se desprenda. Veamos entonces cómo hacer objetos sensoriales para bebés, y no dejéis de leer los consejos de seguridad que os ponemos al final del tutorial.
Materiales necesarios
- Tapas de frascos
- Pegamento extra fuerte
- Diferentes texturas: fieltro, esponja de platos, limpiapipas, telas, pasta, abalorios, papel de aluminio, etc.
- Tijeras
Paso a paso
Esta manualidad es muy sencilla. Solo tenemos que pegar sobre las tapas de frasco las diferentes texturas que hemos escogido. Debemos prestar atención a que queden muy bien pegados, una vez que el pegamento se ha secado debemos probar nosotros mismos si los elementos se despegan al tironearlos. El fieltro, la esponja y las telas se recortan del tamaño de la tapa y luego se pegan. El aluminio hay que apretarlo muy bien antes de pegarlo para que quede compacto.
Para que el bebé experimente diferentes sensaciones debemos escoger materiales con texturas distintas: cosas suaves, ásperas, rugosas, lisas, blandas, duras, etc.
Consejos de seguridad
- Los bebés y niños pequeños deben jugar siempre bajo la atenta supervisión de un adulto, nunca deben ser dejados solos con ningún tipo de objeto.
- Escoged materiales que no se rompan o despedacen si el bebé los tironea o muerde.
- Antes de dar los objetos sensoriales al bebé, probadlos vosotros mismos para comprobar que los elementos están bien pegados y no hay posibilidad de que se despeguen.